LLAMADO A LA ACCIÓN Y PROTECCIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS FRENTE A LA PANDEMIA DEL COVID-19
La Red de Mujeres Afrolatinoamericanas Afrocaribeñas y de la Diáspora es un espacio de articulación de las mujeres afrodescendientes para la construcción de sociedades democráticas, equitativas, justas, multiculturales, libres de racismo, discriminación racial, sexismo y exclusión, aunamos esfuerzos para el combate de la opresión de género y raza por medio de la exposición de la condición de marginalidad vivida por las mujeres afrodescendientes en la región y la lucha contra los estereotipos y prejuicios que recaen históricamente sobre ellas. -Descargar PDF aquí-
Fundamentadas en nuestros mandatos y frente a este panorama de la pandemia del COVID – 19 hacemos un llamado a los gobiernos a adoptar medidas con perspectiva de género, étnico raciales y de diversidad sexual teniendo en cuenta las grandes desigualdades que existen en la región a fin de garantizar los derechos humanos de todos y todas.
En el actual contexto, no podemos dejar de remarcar que esta pandemia afecta de forma diferenciada a las mujeres, quienes venimos afrontando la carga en el ámbito de los cuidados desproporcionada desde antes de la emergencia. Si bien el virus no discrimina las consecuencias económicas, sociales y laborales de esta crisis, también es cierto que no afecta a todo el mundo por igual.
El coronavirus se está convirtiendo en una gran crisis económica y laboral por lo que advertimos que si los gobiernos no acuerdan una respuesta a la situación con el sector privado se agravará aún más la desigualdad de género en el ámbito laboral, el aislamiento es una alteración a la normalidad, que puede durar meses y puede suponer una pérdida económica de por vida para muchas mujeres no vuelvan a recuperar sus ingresos anteriores.
Manifestamos nuestra preocupación ante los efectos sociales y económicos de la pandemia que están afectando de manera desproporcional a las personas de bajos recursos. La pandemia del COVID – 19 magnifica las desigualdades existentes, siendo las mujeres las víctimas colaterales de esta emergencia.
Instamos a los Estados a tomar medidas ante la inseguridad que enfrentan las trabajadoras del hogar, sector laboral desprovisto históricamente de prestación social.
Exhortamos a los Estados a adoptar medidas, públicas y privadas para que los impactos en las economías de las personas afrodescendientes no sean aún más graves teniendo en cuenta que existe un alto porcentaje de empleo informal y cuenta propia en la región llegando a representar hasta el 80 % del empleo en algunos países, estando las mujeres, especialmente las afrodescendientes, sobrerepresentadas en este ámbito.
Hoy ante la crisis provocada por el coronavirus, se evidencia la urgente necesidad de que todos y todas podamos gozar del derecho humano a los servicios de salud, existe la imperiosa necesidad de asegurar el acceso a los servicios de Salud y las medidas de prevención para todas las personas sin discriminación. Cuidarnos, cuidar a las personas implica preocuparse también por la salud mental.
El cierre de los centros educativos y el aislamiento en los hogares han profundizado la crisis de los cuidados, pero también ha evidenciado una brecha de género, étnico – racial y de clase en el acceso al internet para dar continuidad a la educación de los niños y niñas desde sus hogares por lo que se deben tomar las medidas necesarias para evitar el rezago de los mismos.
Los Estados deberán redoblar esfuerzos para informar alternativas, números de contacto y de seguridad ciudadana para proteger a las mujeres, niñas, niños, adolescentes ante el confinamiento establecido para que este no se convierta en violencia.
Garantizar el confinamiento en los hogares no puede ser mediante el atropello a los derechos humanos y los derechos civiles mediante el uso excesivo de la fuerza y la violencia de parte de las fuerzas armadas y la policía.
Llamamos a los Estados a redoblar las medidas de protección para resguardar la vida de los y las defensoras de derechos humanos que en este momento se encuentran en mayor vulnerabilidad.
¡Que la distancia social no se convierta en indiferencia!